Sabemos que el Cristo es una de las imágenes señeras de
nuestra ciudad. También sabemos que es especial por muchas cosas, tal vez
devoción, estilo, su forma de llevarlo, la melena natural o la Cruz de plata en
la que cada Viernes Santo va enclavado para expirar en el cielo de Jerez. Por
ello vamos a analizar brevemente la Cruz del Cristo:
La Cruz del Cristo es una obra de orfebrería que destaca por
ser de increíble realización y originalidad, además de estar en perfectas
condiciones.
Está hecha en plata de Ley por Francisco Márquez en 1674. De
2,30 metros de altura, la cruz posee un toque muy original ya que no es
cilíndrica sino que forma una figura geométrica prismática. Está ornamentada
por dibujos y elementos vegetales en combinación con cartelas. Mide 2,30 metros
de altura. Cada una de las cartelas que se encuentran en la cruz representa o
describe algún momento pasional de Jesús y pasajes importantes pertenecientes a
la Biblia. También aparecen fragmentos sobre momentos de historia de la
hermandad como el siguiente: "Y se puso por obra de don Cristóbal Clemente
Torrijo, cura beneficiado de la iglesia parroquial de San Miguel y por don
Manuel Vicente Torrijo, cura teniente de dicha iglesia, los que consagran su
corazón al Santísimo Cristo. Año de 1744" "Siendo Mayordomo, Antonio
Bravo, y Pedro Ximenez y Alonso Blanco, hermanos mayores. Año 1744" o “En
el año 2000, se procedió a la restauración de la Cruz del Santísimo Cristo de
la Expiración en los talleres sevillanos de Borrero”
En la intersección de la cruz posee unos haces de luz que
representan los rayos del sol. Este sol aparece repujado también en la misma
intersección de la cruz. Encima de los haces nos encontramos el INRI, el motivo
por el cual crucificaron a Cristo. Éste, igualmente es en plata de ley repujada
apareciendo las letras I N R I en plata sobredorada.
Como elemento característico también se puede mencionar que
posee un relicario del Lignum Crucis al pie de la Cruz, un trozo de la
auténtica Cruz de Cristo
Escrito por Mario Muñoz Gonzalez